España.Reynolds, Banesto, Illes Balears. Caisse d’Epargne, Movistar… “Nunca imaginé que aquel equipo de Irurtzun en el que entré con 16 años sería el germen de tantos éxitos”, reflexiona Eusebio Unzué sobre la estructura que él lidera. Un equipo, el navarro, que ha pasado de ser “aquellos españolitos que tenían miedo de pasar de los Pirineos” a ese que se ha convertido en la bandera del ciclismo español. De eso y de su historia hablaron este miércoles nombres propios del conjunto como el propio Eusebio, Pedro Delgado, Ángel Arroyo, Pablo Lastras o el aún activo Alejandro Valverde en los Desayunos de Europa Press cuando se cumplen 40 años de la estructura profesional.
“En el Tour de 1983 nos presentaron los últimos. No teníamos ni puñetera idea de correr, atacábamos y nos cavábamos la tumba”, recordó un divertido Arroyo en el acto. El del Barraco se convirtió en una de las primeras figuras del equipo y una referencia para los que vendrían después. “Yo me fijaba en él. En aquel Tour yo ya me di cuenta de que podía ganar aquella carrera. Los Pirineos para los ciclistas de entonces era una frontera natural, pero también de autoestima”, apuntó Pedro Delgado, que tras su salida del equipo, volvió para cumplir su sueño en 1988, el primer Tour del por entonces Reynolds.
Un conjunto que aguantó la crisis, las modificaciones del reglamento…. para abanderar este deporte en España. “Aquel Tour fue crucial para el equipo”, aseguró Delgado. A la sombra del segoviano creció Miguel Indurain, quien llevaría al ya Banesto a ganar cinco veces en los Campos Eliseos. “Fueron unos pioneros. Y de Pedro se pasó a Miguel, el Chava y ahora Alejandrpo Valverde”, resaltó Pablo Lastras, un ciclista que ha pasado toda su carrera en la estructura y ha continuado después como director.
El que sigue sobre la bici es un Alejandro Valverde camino de los 40 años, pero que aún recuerda cómo de joven se fijaba en Indurain “y fue un honor fichar por el equipo” de su ídolo. “Y no me equivoqué. Ellos fueron los que lograron que creyera que no sólo valía para las clásicas, sino que podía con una carrera de tres semanas”, explicó el campeón del mundo de 2018, que la próxima temporada correrá el Tour, la única espina de la actual formación, como aseguró Unzué: “Es el gran reto, en los nueve años que llevamos con Movistar, no hemos podido ganar el maillot amarillo. Para eso seguimos trabajando”. Objetivos ambiciosos de un proyecto que nació hace 40 años en un pueblo de Navarra y sin el que no se entendería lo que significa el ciclismo en España