HOUSTON. En los entrenamientos de primavera de este año, Framber Valdez les declaró a sus compañeros de equipo que iba a abrir un partido de la Serie Mundial por los Astros.
Del dicho al hecho hay mucho trecho, según el refrán. Pero, siete meses después, aquí está el zurdo dominicano, listo para abrir el Juego 1 del Clásico de Otoño el martes por Houston contra Atlanta en el Minute Maid Park.
“Lo (tomábamos) a ‘chercha’ (chiste)”, expresó con una sonrisa Valdez el lunes. “Pero, yo me enfoqué, porque podía ser que tuviera la oportunidad que pude tener y la aproveché”.
Específicamente, Valdez aprovechó su tercera oportunidad en esta postemporada el jueves pasado en Boston, cuando la rotación abridora de los Astros parecía estar derrumbándose en la Serie de Campeonato de la Liga Americana ante los Medias Rojas. Ningún abridor había pasado de la tercera entrada en los primeros cuatro choques, pero en el Juego 5 Valdez cubrió 8.0 episodios de una sola carrera para adjudicarse la victoria. Y cuando Luis García cumplió dos días después en el Juego 6 con 5.2 ceros, Houston se coronó campeón del Joven Circuito por tercera ocasión en los últimos cinco años.
“Gracias a Dios, me siento bien contento. Me siento emocionado”, dijo Valdez, quien había registrado efectividad de 7.71 en sus dos salidas anteriores en los playoffs antes del jueves. “No lo demuestro al 100%, pero me siento emocionado. Lo sé controlar, porque es una oportunidad que pocos la tienen y es grandiosa”.
Para Valdez, el reto del martes no será nada fácil. Los Bravos acaban de derrotar en la Serie de Campeonato de la Liga Americana a los Dodgers, campeones defensores que habían ganado 106 partidos en la campaña regular. Atlanta, reforzado con figuras como el puertorriqueño Eddie Rosario (JMV de la SCLN), el cubano Jorge Soler, Adam Duvall y Joc Pedersen, además de pilares como Freddie Freeman, Austin Riley y el curazoleño Ozzie Albies, se encuentra en su mejor momento del 2021.
“Uno también tiene su forma de ataque, su forma de jugar”, dijo Valdez acerca de su estrategia para el martes. “El béisbol es el mismo. Yo sé lo que tengo y yo sé que puedo ejecutar en el montículo”.
Para Valdez, sus principales armas son un sinker y una curva aguda. Contra los Medias Rojas la semana pasada, el quisqueyano halló el éxito utilizando más el sinker para establecer su lanzamiento de velocidad, para luego exhibir más su emblemático envío rompiente.
Este último lanzamiento ha producido 149 ponches desde el principio del 2020, la mayor cantidad entre los zurdos de Grandes Ligas y superada sólo por la de 151 de Charlie Morton—curiosamente el abridor de los Bravos para el martes.
“Su curva es bien filosa y la mezcla muy bien con su sinker”, comentó el torpedero de los Astros, el puertorriqueño Carlos Correa.
Para frenar a los encendidos Bravos en el Juego 1, Valdez tendrá que hacer eso mismo, para así cumplir con un final feliz de lo que visualizaba en marzo.
“Tengo mis pitcheos que puedo ejecutarlos, siempre y cuando esté en salud, si Dios quiere”, dijo Valdez. “Mantenerme enfocado y tirar mis pitcheos intensos como los he tirado en estos últimos juegos, para tener resultados contra ellos”.